La Palabra Sana

A lo mejor muchos de ustedes se identificarán con estas líneas, algunos más podrán no estar de acuerdo. En lo sucesivo, espero ser claro en por qué estoy titulando este escrito con “La palabra sana”.

Deseo contar brevemente mi historia, al día de hoy tengo 30 años, próximo a cumplir 31. Puedo decir que mi niñez fue plena y bastante feliz, al llegar a la etapa de la adolescencia surgieron en mí nuevas maneras de ver la vida, y de darme cuenta que además de sentirme atraído por las mujeres, también lo era por los hombres. Puedo decir que me angustiaba experimentar estos sentimientos, pues mis padres tenían muchas expectativas puestas en mí. Resulta muy difícil no tener alguien a tu lado para hablar sobre cuestiones de sexualidad, alguien que te comprenda y que te apoye.

En mi opinión, que a lo mejor muchos de ustedes pueden o no aceptarla, considero que la bisexualidad es una orientación sexual poco comprendida y/o “aceptada”, pues para muchos de mis amigos gays, dicen que ésta (la bisexualidad) es una excusa para no aceptar la homosexualidad. Sin embargo, yo no estoy de acuerdo, pues entonces sería un gay poco común, sentiría una atracción erótico-emotiva hacia la mujer. La finalidad de estos párrafos tampoco es desatar un debate sobre este tema.

Aquellas personas que han estado en algún proceso psicoterapéutico estarán más en contexto. Dentro de mi profesión como psicólogo, el paciente viene a consulta con una queja, una demanda, una historia dominante… Terminología que se utiliza según el enfoque psicoterapéutico. ¿Cuál sería la diferencia entre una charla con el mejor amig@ a una psicoterapia? Creo que entre muchas cosas, a parte de la técnica, es el tipo de relación que se establece entre el paciente y el psicoterapeuta. Con ello, no demerito la ayuda que los amigos pueden aportar en nuestras vidas.

La palabra sana no porque salga de nosotros, psicoterapeutas, sino que es el reflejo de la(s) palabra(s) que el paciente no puede o quiere decir, o que no encuentra. Es desenmarañar una serie de significados y experiencia que van tomando trama (forma) durante el proceso. Las nuevas corrientes constructivistas ponen al paciente como el experto en el problema, porque es él quien lo vive, y el terapeuta toma el rol de un “facilitador”.  Pienso que como profesional de la salud mental debo contribuir al cambio, y empezando por mí.

Días atrás decidí hablar con mi familia sobre este aspecto que no conocían, sin tener la certeza sobre cómo iban a reaccionar. No estoy de acuerdo con la expresión “salir del closet”, no me significa esta metáfora, para mí es mejor decir que dejé que Otros, por ejemplo mi familia, conocieran una parte de lo soy que decidí mantenerla oculta, respecto a mi orientación sexual. Creo que el SER es muy extenso, y no se limita a una preferencia.

Mi familia tuvo una reacción favorable, me dijeron que me aceptaban y que me amaban porque era su hijo o hermano, y no por una preferencia. Me abrazaron y también agregaron que lamentaban que hubiera pasado por momentos en donde me sentí solo, sin verdaderamente estarlo. Puedo decir que tengo la mejor familia del mundo, porque es mía y es a la que pertenezco. En muchas ocasiones nos casamos con las expectativas de los demás, debemos de vivir con libertad, pues sólo hay una vida, y ésta es perene.

La interpretación de este texto queda en tus manos, espero que éste deje algo en ti.

Saludos, de un compañero de viaje que vive y ama con intensidad…

Este escrito llego al correo loqueungayquiere@live.com.mx y su autor pidió que lo publicáramos, así que, muchas gracias por compartirlo.